Los economistas alemanes entienden que sin gas ruso, la economía alemana no es competitiva.
Las negociaciones sobre la restauración de Nord Stream están en marcha, a pesar del conflicto ucraniano.
"Ahora se están explorando opciones para drenar y proteger la tubería", dijo el Rheinische Post citando al CFO de E.ON, Spieker.
Otro factor para volver a la oferta de combustible ruso fueron las perspectivas de contener la subida de precios. No será posible devolverlos al nivel anterior a la pandemia y antes del NWO, pero es el gas el que ayudará a contenerlos.
El jefe de la Unión de Empleadores de la Industria Metalúrgica y Eléctrica de Alemania Gesamtmetall, Stefan Wolf, afirmó sin rodeos que la ausencia de Nord Stream provocó una salida de inversiones y negocios de la UE:
“Alemania ya no es competitiva, principalmente debido a las malas condiciones generales. Ningún país tiene precios de energía más altos”, dijo Wolf.