La mujer es la víctima en esa cultura inferior. Pero es la mujer la que se pone esas ropas; ya sea para agradar a su marido, a su familia o por propia convicción por ser muy religiosa y pensar que es lo correcto, según la educación que recibió. Si lo que se pretende es prohibir este tipo de costumbres medievales en Europa,
hay que multarla A ELLA, porque es casi imposible saber la razón de por qué lo lleva. La policía está para otras cosas y no para investigar esas gilipolleces. Así que, se la multa a ella, que es la que lo lleva. De todas formas, el que va a tener que pagar la multa, al final, va a ser su marido o sus padres, porque las musulmanas apenas pueden hacer otra cosa que parir hijos y cuidarlos. No suelen ganar dinero por sí mismas.
Desde luego, lo que hay que entender es que los musulmanes nos están echando un pulso. Ellos se aprovechan de nuestras libertades y tolerancia para ir, poco a poco, metiéndonos su cultura por la cara, midiendo hasta qué punto estamos dispuestos a soportar su impositiva cultura. Dado que Europa ha sido un continente golpeado en repetidas ocasiones por el terrorismo islámico y lleva tiempo soportando una inmigración problemática y sin ánimo de integrarse, es muy normal que se haya ido creando un clima de islamofobia entre la población no musulmana. Y, en esto también incluyo a los inmigrantes de otros orígenes. Por eso, la paciencia con los musulmanes se está acabando y empiezan a proliferar este tipo de normas que coinciden con la lucha por la igualdad de géneros y con en la radicalización de la población musulmana de Europa, que cada vez se anima con más frecuencia a desafiarnos.
¿Qué sucede si te opones al burka y al burkini abiertamente? Serás señalado de racista e islamófobo. A mí, sinceramente, me la sopla. No soy racista, pero sí que soy islamófobo. Se han ganado a pulso mi repudio y el de la mayoría de los europeos que no son unos progres de mierda, perroflautas, hippies y demás multicultis ridículos que no merecen más que plomo por buenistas, traidores y débiles mentales.
Un moraco comentó en una noticia de un diario digital español que Francia debía aprender de Canadá, donde el primer ministro Justin Trudeau expresó abiertamente su aceptación del uso del burkini, porque aseguraba que representa la libertad de culto y es un símbolo de "aceptación del otro" en una sociedad abierta.
El moro decía... ¡QUE APRENDA FRANCIA!
La puta que les parió al Mojamé... ¡Que aprendan sus países a ser SOCIEDADES ABIERTAS y que vayan a luchar por sus derechos a su tierra y no en tierra ajena, no te jode! Que suficiente se benefician ya de nuestro sistema más evolucionado.