El ejército de Brasil cree que entrará en guerra con Francia
Publicado: 13 Feb 2020, 17:13
Si George Brassens resucitara esta semana, en lugar de escribir La mala reputación hablando de la música militar para criticar el armamentismo y los ejércitos, probablemente cantaría sobre la lógica militar. Antes, eso sí, entonaría una carcajada, como la que aún resuena en Francia después de que se filtrara un informe confidencial del ejército de Brasil, que sitúa al país galo como la principal amenaza de guerra para el gigante sudamericano en el año 2035.
El estudio, de 45 páginas, revelado por Folha de São Paulo y titulado Opciones de defensa 2040 , fue elaborado durante el segundo semestre del año pasado por la Escuela Superior de Guerra de Brasil a partir de 500 entrevistas con oficiales y altos mandos militares para definir la estrategia defensiva del país en las próximas dos décadas. El informe analiza cuatro casuísticas: que Brasil sea aliado incondicional de Estados Unidos o que mantenga equidistancia con todas las potencias, incluida una China que podría superar en poderío a las fuerzas estadounidenses; en ambos casos, previendo una situación de presupuesto militar alto o bien de recorte en el gasto de defensa. Las hipótesis más descabelladas del estudio se dan con las restricciones.
Sobre el papel, la amenaza francesa tiene incluso fecha de inicio. Sería en el 2035 cuando París apoyaría la independencia del pueblo yanomami –etnia indígena repartida entre la Amazonia brasileña y venezolana– y pediría la intervención de la ONU, desplegando tropas en los más de 700 kilómetros de frontera que Francia comparte con Brasil en la Guayana Francesa, territorio de ultramar.
“Saludamos la imaginación sin límites de los autores de ese estudio”, responde la embajada francesa
No obstante, parece que el documento está influenciado por la polémica suscitada en agosto pasado cuando, con motivo de los incendios múltiples en la Amazonia, el presidente francés, Emmanuel Macron, insinuó que el pulmón verde del planeta debería tener un estatus internacional. Esas palabras indignaron al mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, que se enzarzó en un cruce de descalificaciones personales con Macron.