Vergonzoso lo del del PP, instrumentalizando a los profesionales que han dado la cara en Ifema. 25 años lleva el PP desprestigiando la sanidad pública en Madrid, y ahora se quieren colgar las medallas de nuestros sanitarios. Vergonzoso.
“¡No nos representan!”: los gritos para Díaz Ayuso durante el cierre del hospital de IfemaDecenas de sanitarios increpan a la presidenta de la Comunidad de Madrid a su llegada al recintoGloria, de 52 años de Pinar de Chamartín (izquierda), saliendo del hospital de Ifema como uno de sus últimos pacientes de coronavirus. En vídeo, los gritos de Ayuso durante el multitudinario acto de cierre del Hospital Ifema. JAIME VILLANUEVA
LUIS DE VEGA
Madrid - 01 MAY 2020 - 14:40 CEST
“¡Que no, que no nos representan!”. “¡Sanidad Pública!”. “¡Queremos los tests!” o “¡postureo, postureo!” han sido algunos de los gritos de dos decenas de sanitarios que ha tenido que escuchar la presidenta de la Comunidad de Madrid al comienzo del acto de clausura del hospital de Ifema. Junto a Isabel Díaz Ayuso, recuperada hace un par de semanas tras haber sido contagiada, numerosos cargos políticos regionales y municipales tanto del Gobierno como de la oposición. Entre ellos el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida.
En un discurso más sentimental que político la presidenta ha señalado que el hospital del recinto ferial madrileño se “apaga” porque “casi ya no hay contagios”. “Todavía no hemos vencido a la pandemia”, ha dicho Almeida sin poder evitar referirse al “optimismo” que lleva aparejado el cierre, al menos por ahora, del que ha sido el símbolo de la crisis sanitaria en la Comunidad de Madrid, la más golpeada por la pandemia. Unos 4.000 contagiados por el virus han pasado por este centro sanitario de emergencias del recinto ferial de Madrid, que Ayuso ha vuelto a calificar de “hospital milagro”. Abrió el 21 de marzo y este viernes ha visto salir a sus cinco últimos pacientes, cuatro mujeres y un hombre.
La más aclamada ha sido Gloria, de 52 años, que ha estado más de tres semanas intubada y en la Unidad de Cuidados Intensivos. Ha salido en silla de ruedas todavía enganchada al oxígeno, aplaudida por los sanitarios y hasta se ha levantado para el minuto de silencio que la Comunidad celebra cada día en honor a los fallecidos por la pandemia. La mujer ha agradecido a todos el gesto hasta marcándose un leve movimiento de caderas y levantando los brazos haciendo el gesto de la victoria. Otra de las últimas en ser dada de alta ha sido Patrocinio, de 73 años. Oculta tras una mascarilla con una sonrisa de labios rojos, regresa a su casa con un deseo para los sanitarios que la han cuidado: “Tengo pena por los chiquitos que andan por aquí con contrato de un mes. A ver si puede ser que se lo arreglen”.
No todos los sanitarios han criticado la presencia de los políticos. Algunos aplaudían a su paso o pedían fotografiarse con ellos. “Ha sido muy emocionante”, reconoce satisfecha Patricia Ábalos, una técnica de rayos X de 35 años que ha trabajado en Ifema desde el 26 de marzo y que el lunes regresará al hospital Infanta Cristina. En la plaza central que separa los pabellones una de las foodtrucks prepara unos bocadillos de calamares que se han hecho famosos estas semanas. Hasta allí fueron la presidenta de la Comunidad y el alcalde, que por unos minutos se pusieron a despachar bocatas desde el interior. “Llevo toda la mañana rebozando”, bromeó Ayuso, mientras ofrecía uno de los bocadillos a la vicealcaldesa Begoña Villacís. La presidenta regional ha sido muy criticada esta semana por defender el menú infantil que muchos niños reciben estos días en su casa en forma de ayuda oficial y que se basa en comida rápida.
El acto ha sido multitudinario, aunque la inmensa mayoría de los sanitarios no han accedido al pabellón 7, donde han tenido lugar los discursos oficiales. Decenas de personas se agolpaban a la entrada. A algunos les sorprendía que las distancia social de la que tanto se habla no se cumplieran. “Esto es un puto desastre”, señaló un alto cargo del Ayuntamiento mientras accedía a ese pabellón, uno de los que ha acogido a los pacientes.
Mónica García, diputada de Más Madrid, ha criticado desde su perfil en Twitter a los dirigentes madrileños por organizar un acto multitudinario que desde su partido consideran “irresponsable”. “Han utilizado IFEMA y a los cientos de sanitarios que se han dejado la piel como herramienta de propaganda. Lo de hoy es vergonzante. Hoy Ayuso ha reunido a 1000 personas para darse un baño de masas en pleno confinamiento”, ha comentado García en la red social. Pablo Gómez Perpinyà, portavoz de Más Madrid, ha calificado el acto desde su cuenta como un “espectáculo bochornoso y una falta de respeto a todos los madrileños”.
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