IBEROGÉNESIS. El origen de las CIVILIZACIONES

[kawawoki]

Ya. Puede que tengas razón. El subforo Historia no tiene tanto tráfico, a pesar de que allí hay temas casi más interesantes que los que hay en PL o PI sobre noticias de actualidad. De todas formas, este tema es interesante. ¿De dónde has sacado la info?

Por cierto, ya que estáis hablando de las pirámides, tenéis que saber que son mucho más antiguas de lo que se piensa. Es más, hay expertor que afirman que no las construyeron los egipcios, sino una civilización más antigua asentada en la zona.

[Zululu]

Solo hay que darle un poco de tiempo a este tema para terminarlo y luego que lo pasen a Historia si quieren.

La info la saco de revistas Nature, artículos de un paleontólogo español Antonio Arnaiz Villena, que fue mi profesor de antropologia y paleontología en la Complutense, ahora es Catedrático y que fue Director General del Hospital 12 de Octubre de Madrid. Es un oncólogo muy prestigioso.

También saco info de cuadernos de investigaciones de Jorge María Ribero, que no están publicados en Internet, o al menos no están accesibles. Y de otras revistas de ciencia.

[Zululu]

Hay que resumir mucho, porque el 90% de lo publicado es genética de poblaciones y eso se hace muy tedioso y aburrido.

Es historia, pero desde la perspectiva genética, no política.

[Zululu]

La ciencia hoy demuestra que no existió una mucha mezcla racial en España, y que lejos de ello, la mayoría de españoles descienden de un antepasado común, y forman parte del linaje genético más antiguo de Europa.

Dicen que los españoles procedemos de distintas tipologías raciales de Europa occidental, pero la realidad, no es por tener una mezcla sino por ser el origen de todas ellas. De igual forma la genética hoy puede demostrar que el ibero era más celta étnicamente que los propios celtas o que estos mismos descendían de los primeros.

Los resultados genéticos de algunas regiones españolas, no se corresponden con la historia de la Península Ibérica, y más bien parecen corresponder a la realidad de los pueblos más recónditos y aislados de Europa, como los lapones o esquimales (razas que han permanecido milenios sin encontrar presencia de invasor alguno). Por el contrario, la historia convulsa de Iberia y las invasiones de tantos pueblos, hace en algunos casos tan inexplicable esta realidad genética, que es nuestro linaje antiguo, que puede llegar a parecer un enigma.

Los numerosos restos antropológicos hallados, y el descubrimiento en los años 90s del Homo Antecessor (800.000 años ac) y sus descendientes europeos, demuestran que en Iberia se produjo una indiscutible continuidad evolutiva y de sangre, que mantuvo una pureza genética innegable durante miles de años, sólo interrumpida por la visita inevitable de colonos residuales procedentes del Mediterráneo. Esa insólita pureza la mantienen hoy día muchos de los españoles modernos de forma tan intensa y extensa que casi podríamos decir que España, en buena medida sigue siendo la patria ebérita, algo que hace casi inverosímil teniendo en cuenta que una invasión árabe de 800 años se hubiera producido realmente, al no dejar casi rastro genético alguno en la población actual española.

Llevamos ADN de una tercera especie humana

Ya la conocíamos, pero no sabíamos que formaba parte de nuestro linaje. Una nueva investigación publicada este miércoles en la revista «Nature» demuestra que Homo antecessor, la misteriosa especie descubierta en 1994 en la sierra burgalesa de Atapuerca, NO desapareció sin dejar rastro, sino que nos dejó un legado genético. Su ADN se encuentra presente en algún porcentaje en todos nosotros, como también lo está el de otros homínidos europeos extintos como los neandertales o los denisovanos. Lo ha revelado el análisis de un diente de 800.000 años de antigüedad, perteneciente a la colección de fósiles de esta especie encontrada en el yacimiento de la Gran Dolina, del que han podido recuperarse proteínas. El logro es de por sí impresionante, ya que se trata de uno de los conjuntos de datos genéticos más antiguos hallados hasta el momento, pero además confirma algunas sospechas y da otro giro a lo que sabemos sobre la evolución humana.

Los resultados han sido obtenidos por científicos de la Universidad de Copenhague (Dinamarca) en colaboración con José María Bermúdez de Castro y María Martinón-Torres, del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH-ICTS) y otros prestigiosos paleoantropólogos españoles. «Llevamos esperando este trabajo cuatro años», asegura el codirector de Atapuerca, quien lamenta que las medidas de contención contra el coronavirus hayan impedido presentarlo como merecía.

Aún así, Bermúdez de Castro no esconde su entusiasmo. El equipo que dirigía junto a Juan Luis Arsuaga y Eudald Carbonell fue el que descubrió la especie Homo antecessor. En 1997 propusieron que los fósiles de Gran Dolina pertenecían a una nueva especie del género Homo, sugiriendo además que podía haber sido un ancestro común de neandertales y humanos modernos, una conclusión fundamentada en la morfología de los fósiles. Al fin y al cabo, la cara del chico de la Gran Dolina era idéntica a la nuestra. Su propuesta fue recibida con frialdad por sus colegas internacionales, que la consideraron «una osadía» de los investigadores españoles. ¿Un ancestro común en España y no en África? No podía ser.


Ahí se quedó la historia hasta que hace cuatro años un joven investigador italiano que trabajaba en Dinamarca, Enrico Capellini, se acercó a Bermúdez de Castro empeñado en buscar proteínas en los restos de Homo antecessor. «Le di un pequeño trozo de diente, pero no tenía ninguna esperanza de que pudiera sacar nada del esmalte porque los restos estaban muy fosilizados, parecían piedras», reconoce el paleontropólogo español. Cuando unos meses después Capellini le dio la noticia de su descubrimiento, «me pareció increíble, me quedé helado». Había conseguido determinar la secuencia de aminoácidos de los restos de proteínas del esmalte dental. Después, comparando esas secuencias con las que «leemos» en neandertales o sapiens, pudieron establecer su relación genética.

En la base de la Humanidad

Los resultados, obtenidos mediante una técnica vanguardista de espectrometría de masas, ofrecen la información molecular más antigua obtenida hasta la fecha, llegando mucho más atrás de lo que puede decirnos el ADN. Todo un hito, porque debido a su degradación química a lo largo del tiempo, el material genético humano más antiguo recuperado hasta ahora apenas supera los 400.000 años. Curiosamente, cómo una de las proteínas obtenidas en el análisis es AMELY, que se codifica en el cromosoma Y, podemos saber que el diente era de un individuo masculino.
Para Bermúdez de Castro, las consecuencias de este estudio son fundamentales desde el punto de vista de la evolución humana. La identidad de Homo antecessor como especie diferenciada «se fortalece mucho más. Es una especie con todas las de la ley», afirma. Además, las proteínas del esmalte del diente nos dice que estos antiguos homínidos de Atapuerca «son uno de nuestros ancestros, estaban en la base de una nueva humanidad emergente».

Parecido a nosotros

Homo antecessor se caracterizaba por tener una cara muy parecida a la del hombre anatómicamente moderno, con pómulos hundidos y un cráneo de más de 1.000 centímetros cúbicos, lo que se acerca al tamaño del nuestro. Eran altos, alcanzando el 1,65 o 1,70 metros. «Si los viéramos en el metro, vestidos con ropa actual, nos llamarían la atención por su cara extraña y sus cejas prominentes, pero no saldríamos corriendo», dice Bermúdez de Castro. Cazadores-recolectores, capturaban jabalíes y ciervos. También practicaban el canibalismo, probablemente por disputas por el territorio.

«Sabíamos que en nuestro genoma 'frankenstein' llevamos ADN de neandertales y denisovanos porque nos hibridamos con ellos, y ahora sabemos que también lo llevamos de H. antecessor, que está en la base de la humanidad», señala el investigador. Otras especies humanas, como Homo erectus o el hombre de Flores se quedaron por el camino.

El estudio de la evolución humana por proteínas antiguas (paleoproteómica) continuará en los próximos años a través del proyecto PUSHH (Palaeoproteomics to Unleash Studies on Human History), al que pertenecen muchos coautores del estudio. «Es emocionante ser pioneros en la aplicación de un campo innovador. Los próximos años estarán llenos de sorpresas científicas», augura Martinon, directora del CENIEH. Como dice Bermúdez de Castro, «es el inicio del futuro».

https://www.abc.es/ciencia/abci-llevamos-tercera-especie-humana-202004011701_noticia.html

[kawawoki]

Video desde : www.youtube.com

[Zululu]

Bien, no me voy a parar en hablar del origen de las pirámides, no es mi propósito. Me voy a centrar más en los aspectos y variables antropológicas que arqueológicas.

Por ejemplo, una de las posibles madres del faraón Tutankamón, de cuyo ADN, se obtuvo una coincidencia del 96.6% con la población autóctona de la península ibérica (R1b). Se puede observar el color rojo del cabello, frecuente entre la población céltica occidental.



Hoy en día sabemos, gracias a estudios genéticos, que buena parte de la oligarquía egipcia estaba directamente relacionada genéticamente con Europa occidental. Esa realeza de la que formaron parte los más destacados faraones de la historia, nada tenía que ver con los nubios (negros) o con los actuales pobladores de Egipto. Los antepasados de Tutancamun, Ramses II (el más poderoso de los faraones que haya gobernardo Egipto)... fueron iberos, cuyo linaje fue el R1b, hoy prácticamente ausente en la población natural de Egipto. El profesor Ceccaldi y su equipo de investigación demostraron que estos grandes faraones eran leucodermos, es decir de piel clara y de cabellos rojos naturales. Así se describe el fenotipo del faraón Ramsés II, como un titán ibérico de 2 metros de altura, pelo rojo, piel clara y nariz prominente.

http://karlearlsonencastellano.blogspot.com/2011/06/el-faraon-pelirrojo-ramses-ii-readhead.html

Ramses II


Los rasgos de Ramses II no parecen los de un negroide, podrían ser los de cualquier vasco o irlandes (protoceltas)


Las efigies de Ramsés II, son propios de la raza cántabra (canta-ebros) vasca, irlandesa o escocesa (paradigma del pueblo ebérita puro) y que se encuentran frecuentemente en la Europa Atlántica. La raza dinástica egipcia, esa raza de escotos (escoceses) pelirrojos, altos y de tez blanca, fue la que reinó en Egipto durante milenios. Durante un tiempo existió la costumbre de llamar a las princesas egipcias con el nombre de Escota (Scota) si éstas se casaban con un escita. Los escitas eran de raza milesiana, es decir ebérita, y por tanto del mismo linaje que los ancestros de la raza dinástica egipcia. De esta forma se llamaría Escota la esposa de Míl, princesa egipcia hija del faraón Nectonebus, que fue luego reina de España e Irlanda, y también Escota fue llamada la hija del faraón Cindris.

.

[Solvia]

Yo lo que no entiendo es porque siempre a lo rubio y blancura se le a dado trato o preferencia de realeza o estar relacionado con lo divino... con la pureza y la hermosura. Con esto del pelo cobrizo de las momias le estas dando la razon a civilizador con que las momias de paracas si heran rubias y no tenian el pelo cobrizo por la oxidacion.

[kawawoki]

Yo tampoco me fiaría mucho del color del pelo de esas momias de hace miles de años.

[Zululu]

¿Sabéis eso del dedo y la luna?... pues eso, aquí todos mirando el dedo....

Cada civilización, cada pueblo, cada cultura tiene sus propios patrones de belleza distintos que están directamente relacionados con la adaptación al medio, porque es un factor de éxito.

El color de pelo rojo, lo he dicho muchas veces, es un rasgo de herencia neandertal procedente de Europa Occidental. Cuando el pelo se oxida, tiende a cambiar a color verde.

Ramses II tenía 90 años cuando murió. Fue un hombre enorme que midió casi 2 metros y también se le conocía como el semental. Tuvo más de 140 hijos. A los faraones, si morían ancianos lo normal es que tuvieran canas y habitualmente se les teñía el pelo a su color natural. Imagino que fue lo que pasó a Ramses II que ya tendría unas cuantas canas con 90 años. La realidad, cuando se le hicieron las pruebas de ADN a la momia de Ramses !!, comprobaron que tenía tinte rojo en el pelo, pero también comprobaron al hacer la pruebas de ADN a la raiz del cabello, que su color natural fue el cobrizo.

No sé, a lo mejor tendrían que haberle hecho pruebas de ADN en MyHeritage, así os convencería más.

[kawawoki]

No sé, a lo mejor tendrían que haberle hecho pruebas de ADN en MyHeritage, así os convencería más.

Mira este por dónde sale...