Creo que confundes los términos o quizá nos expresamos de forma diferente.
Cuando hablamos aquí de "día histórico" nos referimos a que en la fecha en cuestión en Argentina se ha producido un hecho relevante que quedará marcado en la historia del país, no a que ese hecho tenga que ser positivo.
Para que me entiendas mejor: Nadie tendrá la osadía de calificar como día estupendo el 28 de junio de 1914, fecha de los asesinatos del archiduque Francisco Fernando y su esposa, que desataron la I Guerra Mundial. Pero nadie podrá negar tampoco que se trató de un día histórico.
Nadie en su sano juicio podrá decir que el ataque contra Pearl Harbor fue un hecho positivo. Sin embargo, ese 7 de diciembre de 1941 fue sjn duda un día histórco para EE UU y para la crónica mundial.
No confundo ninguna clase de término cuando escribí lo que escribí. El aborto ya estaba garantizado, ayer, hoy, y si no se aprobaba hoy, mañana. De histórico tiene poco sabiendo que ya estaba aceptado políticamente. De histórico tiene poco, simplemente porque era un hecho ya consumado políticamente. Estuvo a punto de salir en la presidencia de Macri, aún admitiendo éste que aunque estuviera en contra, promulgaría la ley igual.
Si la aprobación de la ley del aborto en Argentina fue positiva o negativa dependerá de la persona a la que preguntes, al margen de lo que yo pueda opinar.
Para una antiabortista militante será un día triste y nefasto, para una mujer de las que llevaban años luchando por dicha ley, se tratará de la fecha de una gran conquista femenina. Pero se tenga la opinión que se tenga, FUE UN DÍA HISTÓRICO PARA ARGENTINA. Estoy seguro que me entiendes.
Hecho irrelevante tratándose de un hecho consumado, y no sólo eso, sino evidente. Y no, no te entiendo, porque estoy viendo lo que hay detrás, que potencialmente es mucho más importante que aprobar algo que en este país se aprobaba tarde o temprano. Te dejás guiar por una cortina de humo.
Respecto al presidente Alberto Fernández, ¡qué duda cabe que dicha ley ha sido para él un éxito personal! Y lo ha sido por la simple razón de que se implicó activamente a favor de ella, mostrando una visible alegría al ser aprobada. Del mismo modo, de haber sido rechazada, tal cosa le habría supuesto un fracaso directo.
¿Qué importan los éxitos personales de un cínico? ¿de verdad son éxitos personales? Se implicó activamente en las marchas por la muerte de Alberto Nisman, dudando que la muerte del fiscal de la causa AMIA sea un suicidio, allá por 2015 - 2017. Hoy hace contorsionismo extremo para desdecirse. En 2013, cuando Cristina Kirchner impulsaba una reforma judicial para fabricar su impunidad ante los hechos de corrupción que asomaban, Alberto Fernández salió a decir lo que dicen hoy los opositores a la actual reforma: que era un atropello al sistema republicano y democrático, a las instituciones del país y un pedido de impunidad para la entonces presidente y su vice, Amado Boudou. Recuerdo muy bien las discusiones amargas que tuve con los kirchneristas en Sin Dramas, citando artículos y textos de la reforma judicial. Hoy presidente, Alberto Fernández apoya una reforma judicial de la misma clase que criticó públicamente en el pasado, impulsada por la misma persona a la que defenestró aquella vez; la misma persona que hoy es su jefa política y su vicepresidenta. ¿En serio tengo que pensar, o "entender" el logro personal de un cínico? ¿tengo cómo comprobar eso fehacientemente con alguien de semejante cariz? ¿vale la pena comprobarlo viendo la calaña de semejante sujeto? La misma categoría abarca a Sergio Massa, hoy aliado de Cristina y Alberto Fernández, pero en 2013, con reformas judiciales de la misma intencionalidad, un paladín antikirchnerista total.
Los cínicos no tienen logros personales, convicciones, ni días históricos, sólo tienen oportunidades y eventos a los cuales se montan, como si fueran sus abanderados, para sacar todo el provecho posible. Eso es Alberto Fernández, Cristina Fernández, Sergio Massa y todo el peronismo en general.
Por lo demás, aun sin conocer en detalle como vos las peripecias de la política argentina, tengo una idea formada sobre los populismos en general y el peronismo en particular, así que no será fácil sorprenderme al respecto.
Tengo la impresión de una benevolencia criminal de tu parte respecto a los populismos, o por lo menos una confusión terminológica. Tu posición naïve es más propia de un europeo de izquierda cómodamente refugiado en un país desarrollado alejado de esa plaga, que de un sudamericano azotado por ella. Precisamente remarqué tu confusión porque no sos capaz de entender lo que caracteriza por sobretodo a un populismo, lo que anduvo sobrevolando todo este tiempo con el aborto y otros asuntos que se trataron aquella noche, y es un término que usé insistentemente para responderte: el cinismo. Los populismos son cínicos, no creen en nada salvo en construir poder, y eso son; una maquinaria de partido hegemónico que busca construir y permanecer en el poder sin importar qué movimiento social o ideología política hay que abrazar. Por lo tanto, lo que vimos aquella noche fue cinismo: el aborto les iba y venía, como lo demostraron en el pasado, pudiendo aprobarlo pero no haciéndolo. Simplemente se subieron a la cresta de la ola feminista para sacar votos y apoyo político; lo que les importaba era más el ajuste a los jubilados y las jubilaciones de privilegio de "la señora" que si el aborto se legalizaba o no. Puro mascarón de proa de un par de cínicos.
Ustedes tienen mala suerte con los gobernantes, pero no olvidemos que todos ellos han sido elegidos por millones de argentinos o les han apoyado directamente con bastante fanatismo, desde Perón a Alberto Fernández, pasando por Lanusse, Isabel, Alfonsín, Menem o incluso Videla y Galtieri.
¿Perdón, lo que marco en negro es una justificación de que la legitimidad de origen da impunidad en la legitimidad de ejercicio? ¿es una justificación de este gobierno y todas sus políticas? ¿una justificación del populismo? Precisamente la creación de fanáticos es una especialidad de los populismos, por lo que estás viendo sus frutos. No voy a dar rodeos:
millones de argentinos son bestias ignorantes más en común con una vaca que con un ente racional, que sirven para pastar por el campo y pensar con el estómago más que con el cerebro, y por eso votaron este engendro que nos gobierna hoy, tan sólo para hambrearlos aún más y condenarnos a todos a vivir gobernados por una oligarquía que se vende de izquierda y viven como señores capitalistas de derecha mientras condenan la opulencia y prosperidad ajenas, tan solo porque esa opulencia no les pertenece o no pueden tomarla.
Millones de argentinos son animales de carga arreados por un plan social, sumisos y más allá de cualquier redención moral; son entes inmorales, susceptibles de cualquier desprecio, con los que nada tengo yo que ver, y cada vez tendré menos porque nada de sus supuestos valores, que son un decálogo de la decadencia, de la pobreza, de la sumisión y la miseria, me representarán jamás; esos millones de argentinos son gentuza que le sigue haciendo el juego a esta farsa de sistema político que llamamos democracia, una democracia que merece ser arrasada porque no ha hecho más que destruir el país y dejarnos esclavos de una casta de miserables que no quieren ciudadanos sino siervos. Quieren energúmenos que viven reclamando inclusión y derechos pero jamás la obligación y responsabilidad que todo derecho conlleva; hablan de los males de la meritocracia porque ellos no creen en el mérito sino en el privilegio. Esos argentinos eligen una casta de privilegiados que sólo quieren bestias de carga pero pregonan ser un "gobierno de científicos" ¿ves el cinismo otra vez?
Millones de argentinos no me merecen respeto alguno y no me importa lo que pase con ellos. Porque simplemente nos condenaron. Millones de argentinos votan a un gobierno que culpa a otros de las desgracias que causa, como excusa para destruirlos y concentrar cada vez más poder y debilitar cada vez más la institucionalidad del país; un gobierno que habla de "medios hegemónicos" y culpa a un pasquín ridículo de todos los males del país como si esos medios fueran el poder, y un gobierno a cargo del Estado no fuera el verdadero poder sino una víctima a la defensiva; otra posición cínica. Más que cínica, perversa, porque esa es una maniobra propia de gobiernos dictatoriales, no democráticos.
¿De qué no me tengo que olvidar? no me incluyas en tu "no olvidemos" porque no sos nadie para hablar por mí, y como verás, tengo mis propias, diferentes, y bien fundadas opiniones. Por otro lado ¿estás mezclando populistas y antipopulistas? esa hilada de gobernantes que mencionaste no puede ser mencionada sin hacer distinciones, porque sino es caer en errores, malas interpretaciones o generalizaciones absurdas ¿Lanusse un populista? era un acérrimo antipopulista de carácter pragmático y liberal. Ni Lanusse, ni sus adversarios Videla o Galtieri eran populistas; fueron una reacción derechista y de facto contra el populismo. Alfonsín no era populista, era de la orientación socialdemócrata del radicalismo, y de populista tenía poco; los populistas fueron los que le hicieron la vida imposible. Mezclaste peras con manzanas, y en algunos casos, como el de los tres generales que mencionaste, ninguno de ellos era populista. Ese término los hubiera ofendido. Lo populista viene de todo lo peronista que acabaste de nombrar, con Menem atenuando esa calificación por sus políticas neoliberales y su intento de alinear a la Argentina con el mundo desarrollado desde una posición de centroderecha. El populismo de Menem fue de derecha, y bastante alejado de lo que sería "embanderarse con los pobres". Por algo se lo consideró en su momento (y hoy mismo) un continuista de las políticas económicas de la dictadura, y por algo a Macri se lo consideró un heredero político de Menem, por lo que a este último lo tenés que poner en una zona gris.
Por último:
aun sin conocer en detalle como vos las peripecias de la política argentina
No conocés los detalles de nada.
Dejá de escribir con tanta insolencia e impunidad sobre la historia de un país que no es el tuyo ni conocés, como si pudieras arrogarte ese derecho. No lo tenés, ni te lo otorgará ninguno de los argentinos aquí presentes ni yo.
Nosotros no nos metemos en este foro en cuestiones de historia y política española, vos no te las vengas a dar de "argentólogo" como si tuvieras derecho a opinar. No tenés derecho a opinar. Metete en tus propios asuntos. Porque el hecho que vengas a escribir con tanta soltura y desacierto sobre temas que "tocás de oído" ni conocés,
es un insulto.