La agonía de Occidente: posmodernismo e inmigración

[Astur]

No lo creo, Rienzi. Eres un conocido hispanófobo, que rechaza el legado de la Corona Hispánica fuera de nuestras fronteras.

[Rienzi]

No lo creo, Rienzi. Eres un conocido hispanófobo, que rechaza el legado de la Corona Hispánica fuera de nuestras fronteras.

Yo reconozco el legado del Imperio Español dentro de nuestras fronteras, que es lo que importa. A mí Latinoamérica me importa poco. Les deseo lo mejor a los latinoamericanos, eso sí; pero no creo que seamos hermanos, ni creo en la hispanidad.

[Pikotasso]

El progresismo es la anticultura. No hay nada en que se entrometa que no quede destruido, ahora quieren devastar la música clásica, que es de los pocos bastiones libres de este virus mortal. Todas las instituciones culturales han caído: la universidad, la arquitectura, la escultura, la pintura, la literatura, la historia, la música popular, etc., y ahora la música clásica. EL progresismo es inhumano, una abominación vomitada por el liberalismo anglosajón. La historia los juzgará como los mayores genocidas culturales que ha tenido la humanidad.

Interesantes palabras, venidas de un anglófilo confeso.

Yo admiro la Inglaterra del imperio, no el país progre y multicultural de hoy. Pero esto es algo que he dicho muchas veces.

O sea, admiras al imperio que basó su existencia en la esclavitud, el saqueo ilimitado de recursos, el genocidio de pueblos enteros, incluyendo el exterminio hasta el último individuo, el engaño, la perfidia y las hambrunas provocadas.

Muy bonito, te vuelves a retratar.

Admiro al Imperio que dio a Newton, a la Revolución Industrial, a la máquina de vapor, a Darwin, a Adam Smith, a Shakespeare, a Alexander Fleming, a Alan Turing, a Michael Faraday, a Tomas Moro, a Charles Dickens, Alexander Graham Bell, a la Universidad de Cambridge, a la Universidad de Oxford, etc.

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De hecho, admiro a todos los imperios europeos porque fueron una excepción grandiosa en la historia de la humanidad. Fueron imperios creadores.

No, no, nada de eso. Las ilustres individualidades de un imperio o sus construcciones y descubrimientos no sirven para tapar los crímenes del mismo y la base de su existencia, eso es otro desvarío tuyo de una lista interminable.

Yo puedo admirar a Fedor Dostoievski o a Leo Tolstoi y no por ello voy a aplaudir el imperio de Iván el Terrible o del zar Nicolás II. Puedo admirar al gran Nikolai Vavílov o la construcción del canal Moscú-Volga y no por ello voy a justificar los excesos del imperio de Stalin. Puedo admirar a Thomas Mann y no por ello voy a entusiasmarme con el Tercer Reich de Hitler.

Que no das una, titi, tus babosadas van en aumento. Estás listo para el diván del psiquiatra.

[Astur]

No lo creo, Rienzi. Eres un conocido hispanófobo, que rechaza el legado de la Corona Hispánica fuera de nuestras fronteras.

Yo reconozco el legado del Imperio Español dentro de nuestras fronteras, que es lo que importa. A mí Latinoamérica me importa poco. Les deseo lo mejor a los latinoamericanos, eso sí; pero no creo que seamos hermanos, ni creo en la hispanidad.

Lo que demuestra que has mentido en tu exposición anterior, y yo tengo razón. Eres un simple y vulgar hispanófobo, al cual se le mojan las bragas cuando piensa en el Imperio anglosajón.

España no sería NADA de lo que es sin Hispanoamérica. Sí. Hispanoamérica e hispanoamericanos. No Latinoamérica y latinoamericanos. Tú no creerás en la Hispanidad. Una posición que seguro tiene mucho que ver con tu más que conocido eurocentrismo. Cargado de un gran componente supremacista y racista. El hispanismo trasciende esos límites, tendiendo a unir a gentes de diferentes continentes, que hablan un mismo idioma, una misma base cultural cristiana (católica), pero diferentes orígenes étnicos. Es por eso que NO CREES en la Hispanidad.

Por mi parte, yo sí creo en la Hispanidad. Y creo que España debería acercarse al resto de pueblos hispanos. Sobre todo, ahora que Europa se está hundiendo por su humillantes seguidismo a EEUU y sus intereses, que buscan utilizar al Viejo Continente de flojador, para mantener su decadente hegemonía.

[Rienzi]

No lo creo, Rienzi. Eres un conocido hispanófobo, que rechaza el legado de la Corona Hispánica fuera de nuestras fronteras.

Yo reconozco el legado del Imperio Español dentro de nuestras fronteras, que es lo que importa. A mí Latinoamérica me importa poco. Les deseo lo mejor a los latinoamericanos, eso sí; pero no creo que seamos hermanos, ni creo en la hispanidad.

Lo que demuestra que has mentido en tu exposición anterior, y yo tengo razón. Eres un simple y vulgar hispanófobo, al cual se le mojan las bragas cuando piensa en el Imperio anglosajón.

España no sería NADA de lo que es sin Hispanoamérica. Sí. Hispanoamérica e hispanoamericanos. No Latinoamérica y latinoamericanos. Tú no creerás en la Hispanidad. Una posición que seguro tiene mucho que ver con tu más que conocido eurocentrismo. Cargado de un gran componente supremacista y racista. El hispanismo trasciende esos límites, tendiendo a unir a gentes de diferentes continentes, que hablan un mismo idioma, una misma base cultural cristiana (católica), pero diferentes orígenes étnicos. Es por eso que NO CREES en la Hispanidad.

Por mi parte, yo sí creo en la Hispanidad. Y creo que España debería acercarse al resto de pueblos hispanos. Sobre todo, ahora que Europa se está hundiendo por su humillantes seguidismo a EEUU y sus intereses, que buscan utilizar al Viejo Continente de flojador, para mantener su decadente hegemonía.

No soy racista ni supremacista, pero sí que amo lo que fue la cultura y la historia de mi país y no quiero que cambie, aunque ya lo han trastocado todo y ahora España es una sombra irreconocible.

Como ya he escrito otras veces, si uno lee a los grandes filósofos, teólogos, artistas y literatos españoles del pasado, encuentra en ellos una inspiración no en Latinoamérica, sino en el mundo grecorromano. España fue un dulce fruto del Imperio romano y del catolicismo, no del continente americano. Y nuestro lugar histórico es el Mediterráneo, no América.

Latinoamérica fue una quijotada, una empresa imposible de realizar. Se quiso construir una gran España gigantesca y eso era imposible, por eso se fracasó. De hecho, ni siquiera es posible una unión latinoamericana, existen demasiadas rencillas, disputas, desacuerdos, agravios, etc., entre estos países como para que se puedan unir.

Y el Reino Unido está muerto y enterrado. Hablar de él es hablar de un cadáver putrefacto.

[Astur]

No soy racista ni supremacista, pero sí que amo lo que fue la cultura y la historia de mi país y no quiero que cambie, aunque ya lo han trastocado todo y ahora España es una sombra irreconocible.

Como ya he escrito otras veces, si uno lee a los grandes filósofos, teólogos, artistas y literatos españoles del pasado, encuentra en ellos una inspiración no en Latinoamérica, sino en el mundo grecorromano. España fue un dulce fruto del Imperio romano y del catolicismo, no del continente americano. Y nuestro lugar histórico es el Mediterráneo, no América.

Latinoamérica fue una quijotada, una empresa imposible de realizar. Se quiso construir una gran España gigantesca y eso era imposible, por eso se fracasó. De hecho, ni siquiera es posible una unión latinoamericana, existen demasiadas rencillas, disputas, desacuerdos, agravios, etc., entre estos países como para que se puedan unir.

Y el Reino Unido está muerto y enterrado. Hablar de él es hablar de un cadáver putrefacto.

Claro que lo eres. Eres eurocéntrico. De ahí que rechaces todo lo que no huela a blanco caucásico. Y da la casualidad de que en Hispanoamérica (que no Latinoamérica), la mayor parte de la gente es mestiza. De ahí viene tu gran desprecio al legado español fuera de nuestras fronteras. España fue el primer imperio global. Y no se nos puede olvidar, que si el proyecto hispanoamericano fracasó, fue por culpa de Francia y Reino Unido. Y si muchos países hispanoamericanos están enfrentados, fue porque así lo quisieron los anglosajones. De hecho, sólo el detalle de que los virreinatos se hayan dividido en tantos países, da buena muestra de cómo Reino Unido y EEUU envenenaron aquellas tierras con su propaganda y financiando a élites egoístas que querían su propio cortijo.

[Rienzi]

No, no, nada de eso. Las ilustres individualidades de un imperio o sus construcciones y descubrimientos no sirven para tapar los crímenes del mismo y la base de su existencia, eso es otro desvarío tuyo de una lista interminable.

Yo puedo admirar a Fedor Dostoievski o a Leo Tolstoi y no por ello voy a aplaudir el imperio de Iván el Terrible o del zar Nicolás II. Puedo admirar al gran Nikolai Vavílov o la construcción del canal Moscú-Volga y no por ello voy a justificar los excesos del imperio de Stalin. Puedo admirar a Thomas Mann y no por ello voy a entusiasmarme con el Tercer Reich de Hitler.

Que no das una, titi, tus babosadas van en aumento. Estás listo para el diván del psiquiatra.

La base de la existencia de un imperio es su pueblo. Y el pueblo británico, que no había año que no diera un gran genio de talla mundial, era una materia prima excepcional, por eso creo un gran imperio. Los españoles surgidos de la Reconquista, que también fueron una materia prima fenomenal, construyeron también su propio imperio y a ellos se debe su grandeza.

De la misma manera, la decadencia de los imperios, tanto el británico como el español, se debió a la degradación del factor humano, a su agotamiento.

Todo lo demás es querer justificar la impotencia de otros pueblos que no han logrado nada.

[Rienzi]

No soy racista ni supremacista, pero sí que amo lo que fue la cultura y la historia de mi país y no quiero que cambie, aunque ya lo han trastocado todo y ahora España es una sombra irreconocible.

Como ya he escrito otras veces, si uno lee a los grandes filósofos, teólogos, artistas y literatos españoles del pasado, encuentra en ellos una inspiración no en Latinoamérica, sino en el mundo grecorromano. España fue un dulce fruto del Imperio romano y del catolicismo, no del continente americano. Y nuestro lugar histórico es el Mediterráneo, no América.

Latinoamérica fue una quijotada, una empresa imposible de realizar. Se quiso construir una gran España gigantesca y eso era imposible, por eso se fracasó. De hecho, ni siquiera es posible una unión latinoamericana, existen demasiadas rencillas, disputas, desacuerdos, agravios, etc., entre estos países como para que se puedan unir.

Y el Reino Unido está muerto y enterrado. Hablar de él es hablar de un cadáver putrefacto.

Claro que lo eres. Eres eurocéntrico. De ahí que rechaces todo lo que no huela a blanco caucásico. Y da la casualidad de que en Hispanoamérica (que no Latinoamérica), la mayor parte de la gente es mestiza. De ahí viene tu gran desprecio al legado español fuera de nuestras fronteras. España fue el primer imperio global. Y no se nos puede olvidar, que si el proyecto hispanoamericano fracasó, fue por culpa de Francia y Reino Unido. Y si muchos países hispanoamericanos están enfrentados, fue porque así lo quisieron los anglosajones. De hecho, sólo el detalle de que los virreinatos se hayan dividido en tantos países, da buena muestra de cómo Reino Unido y EEUU envenenaron aquellas tierras con su propaganda y financiando a élites egoístas que querían su propio cortijo.

Yo nunca hablo de blanco caucásico, ni de otros términos nazis, porque son ajenos a mi pensamiento, que es el tradicionalista. En el pensamiento tradicional español no se habla de razas. Además, no creo que los españoles seamos muy similares a los nórdicos, ni falta que nos hace. De hecho, en Latinoamérica sí que se utiliza un lenguaje bastante racista, seguramente heredado de los EEUU.

El caso es que yo no soy hispanista porque Latinoamérica me resulta ajena. Cuando estudio a las mentes brillantes del imperio español, no aparece Latinoamérica. Cuando me leí, por ejemplo, los episodios nacionales de Benito Pérez Galdós, Latinoamérica prácticamente no aparecía, y eso que narra los hechos nacionales relevantes del siglo XIX. No sé qué tiene en común un boliviano conmigo si casi ni entiendo su español. Ahora bien, si en lugar de hablar de Latinoamérica o Hispanoamérica, me señalas por ejemplo a Argentina o a Uruguay, pues ahí sí que puedo encontrar más similitudes y una mayor hermandad. Somos parecidos a ciertos países latinoamericanos, pero no a todos los países latinoamericanos ni a Latinoamérica en su conjunto, o a Hispanoamérica, como quieras llamarla. Una confederación con Argentina, Uruguay e Italia me parecería más factible (y más familiar) que una unión hispanoamericana.

[summer_of_69]

Yo tengo muchos alumnos latinoamericanos (digo "latinos" porque también hay brasileños), y sí que noto muchas cosas en común con ellos. No veo incompatible desear estrechar lazos con Latinoamérica y ser europeísta, creo que España tiene que representar el papel de puente entre ambos continentes. De hecho, fue una cosa que se hizo en tiempos de Aznar (no todo lo que hizo fue malo), y que creo que tendría que continuarse.

[Zululu]

Si tienes alumnos brasileños, entonces el término correcto sería Iberoamericanos.