Instantánea

[niccolò]

La suave brisa jugaba, ajena a todo, con su media melena rubia, y casi sin querer, algunos mechones de pelo rompían la armonía de la perfección, pero de tal modo, que aún ese ligero movimiento, acrecentaba el refinamiento del instante. Unos grandes ojos, tan solo castaños, miraban hacia el infinito, aunque únicamente estaban atentos a su interior, incluso se dibujaban un tanto achinados solo por el esfuerzo de concentrarse en la lejanía, y no para ver, si no simplemente para huir hacia dentro.

Los labios carnosos, de color carmesí y húmedos por el efecto de un insignificante lluvia que decoraba la escena, se movían lentamente, como repitiendo un nombre, un nombre corto y triste, un nombre que sonaba a amor y desesperación.

El bello rostro se completaba con una nariz de trazo perfecto aunque algo enrojecida por lo que yo creí tristeza. Y tal vez solo fuera un resfriado. El rostro, tal como lo vi, me pareció una pequeña obra maestra de la naturaleza, y prendió tanto en mí interior que me hice el propósito de transformarlo en perpetuo, para poder guardarlo en mi memoria de los prodigios.

Cerré los ojos muy despacio, notando como mis párpados descendían con lentitud, mientras yo iba reteniendo en mi retina la imagen celestial que en ese preciso momento tenía delante de mí. Por fin, ya con los ojos cerrados, cuando dejé de ver el rostro de la mujer llena de felicidad, comencé a mirar en mi interior y era tan hermosa su imagen que no dude en guardarla, para siempre, en un apartado de mi memoria selectiva, un lugar fuera del alcance de cualquier eventualidad que pudiera de forma involuntaria alterar, aunque fuera mínimamente, mi recuerdo más especial.

Volví a abrir los ojos y como suponía la mujer seguía allí, sin moverse, reflexionando desde su inexorable belleza. Creo que no se había movido, creo que su mirada era idéntica, creo que la expresión de su rostro no podía enunciar mejor sus pensamientos, sigo opinando que era puro arte en movimiento, el movimiento de su pelo con el que jugaba el ligero viento que daba vida a aquella verdad mayestática.

Debería rondar por el punto álgido de la vida, donde el camino de ida ya ha finalizado y la vuelta comienza sin ninguna prisa, todo ello iluminado por la realidad suprema de una mujer hermosa, intensa y plena.

Sorprendentemente a pesar de haber trascurrido tan solo unos segundos, no pude reconocer la perfecta belleza guardada en mi interior, ciertamente era ella, era inmensamente bella, pero mi recuerdo, tal vez , tergiversado por mi percepción de ella misma, le superaba, y después de unos minutos de duda, me pareció coherente, justo e incluso reparador. De ese modo no necesitaba acudir a la fuente para beber el elixir de la armónica hermosura.

Estaría siempre en mi corazón, y en esos momentos de la vida, en que necesitas escuchar imperiosamente una melodía, leer una frase determinante o ver una imagen reconfortante yo la tendría a ella.

Al día siguiente, de camino al trabajo, volví a pasar por el mismo escenario, y por supuesto no vi a la mujer pensativa y feliz, me detuve un momento para, con el mismo fondo del día anterior, imaginar a mi musa de forma perfecta. Cerré los ojos pacíficamente, y su imagen se fue construyendo como un pequeño puzle de brillantes piezas que deberían ensamblarse, sin más.

Pero el destino me tenía guardada una triste sorpresa, la prevista, sencilla y emocionante reconstrucción no fue capaz de dar forma al rostro instantáneo descubierto el día anterior y guardado para siempre, en mi interior.

Después de creer conseguir la perfección y poseerla para mi disfrute en cuanto la necesitara, me di cuenta de que aunque seamos capaces de almacenar de forma escrupulosa un recuerdo o una imagen de una persona, la vida está hecha de momentos instantáneos e irrepetibles y del mismo modo que ya no me pareció igual cuando la volví a ver después de guardármela en mi memoria la primera vez, así tampoco supe cómo darle la forma deseada a partir de un recuerdo, que creí inmortal.

Ahora, algunos días camino sin ninguna esperanza por las mismas calles, donde conocí la belleza en estado puro, con el absoluto conocimiento de que nunca volveré a disfrutar de ese instante mágico, y con la leve esperanza de no volver a ver nunca más a la mujer que una vez me pareció la más hermosa del mundo, tal vez eso me sirva para no querer acaparar bellezas efímeras y buscar otras bellezas posiblemente no tan impactantes, pero más reales, duraderas y necesarias.

Y ahora, ya no suelo buscar la felicidad desde la belleza, he aprendido a buscar la belleza desde la felicidad, he aprendido a conocer personas y a partir de ese conocimiento mutuo, ser capaz de determinar sí para mí se convierten en hermosas o no. Y para mi sorpresa he encontrado hermosura oculta bajo una capa de aparente fealdad y por el contrario mucha fealdad enmascarada bajo una belleza un tanto efímera, artificial y poco atractiva.

Y como dijo George Sand: “La belleza exterior no es más que el encanto de un instante. La apariencia del cuerpo no siempre es el reflejo del alma”, y puesto a elegir yo me quedo con el alma de las personas, esa alma llena de sensibilidad que con el paso de los años mejora de forma inversamente proporcional a la belleza exterior.

O tal vez era pelirroja...

[ChicaRally]

La belleza está en el interior de las personas, la belleza física con el paso de los años, como una fotografía se va estropeando... la belleza interior es lo importante...

Bonito niccoló, por unos instantes, tuviste retenida esa instantánea en tu mente... Suele pasar, que lo perfecto suele ser lo no improvisado, como esa mujer y esa instantánea... Sí se quiere volver a repetir, nunca sale igual...

Gracias por compartirlo...

[Athenea]

Precioso como siempre !
Y no era pelirroja !

Esto me ha recordado cuando yo era super joven , tenia un "pretendiente " que se pasaba la vida delante de mi casa , y un día me dijo que había visto asomada a la ventana a mi hermana mayor y que era la mujer más guapa que había conocido , yo no tengo hermana mayor , a quien vio es a mi madre , el pobre se quedó chafado cuando se lo dije !

[Estela]

Bello ,todo lo que escribes .....el libro lo tienes que escribir yaaaa

[niccolò]

La belleza está en el interior de las personas, la belleza física con el paso de los años, como una fotografía se va estropeando... la belleza interior es lo importante...

Bonito niccoló, por unos instantes, tuviste retenida esa instantánea en tu mente... Suele pasar, que lo perfecto suele ser lo no improvisado, como esa mujer y esa instantánea... Sí se quiere volver a repetir, nunca sale igual...

Gracias por compartirlo...

Estando de acuerdo en lo que dices, aún sin querer uno se fija primero en la belleza más aparente, y luego esa persona va mejorando o perdiendo su hermosura con el conocimiento que de ella tienes!!
Y sí, así sucedió fue un instante de perfección que no fui capaz de retener!!
Gracias por pasarte CR.

[niccolò]

Precioso como siempre !
Y no era pelirroja !

Esto me ha recordado cuando yo era super joven , tenia un "pretendiente " que se pasaba la vida delante de mi casa , y un día me dijo que había visto asomada a la ventana a mi hermana mayor y que era la mujer más guapa que había conocido , yo no tengo hermana mayor , a quien vio es a mi madre , el pobre se quedó chafado cuando se lo dije !

Preciosa como siempre, ella digo!
Y me pareció por un momento que podría serlo, pelirroja, digo!
Ahora ya no tienes pretendientes que se pasen horas delante de tu casa?
Igual no lo sabes, fíjate a ver!!
Igual te llevas una sorpresa o tal vez preferirías que eso le pasara ahora a tu hija!!
Gracias.

[niccolò]

Bello ,todo lo que escribes .....el libro lo tienes que escribir yaaaa

Es posible que todo lo que cuelgo tenga algún valor literario, pero no todo lo que escribo, hay cosas
que nunca publicaría, y escribir un libro es algo que me merece mucho respeto, no me veo capaz,
soy más de textos cortos, sin grandes argumentos!! Pero tal vez lo intente, de hecho cuentos de 50 folios para mi hijo si escribí algunos!!
Y gracias por leerme!!

[Leary]

Llego tarde, llego tarde!!!

Que conste que pasé, leí y me gustó.

[niccolò]

Llego tarde, llego tarde!!!

Que conste que pasé, leí y me gustó.

A tí te lo perdono, como no!!
Me tienes muy leído!!
Y gracias