Lo que los cruceros significan en los puertos que los sufren, lo son los SUV para muchas ciudades: contaminación y consumo brutales, ruido, ocupación de espacios, inseguridad (en contra de lo que la gente piensa, son vehículos muy poco estables y causan un número desproporcionado de accidentes) y, para más inri, totalmente innecesarios, sobre todo en las ciudades.
¿Quién coño necesita un SUV de gran tamaño en Madrid, Barcelona, París o Londres y para qué, sobre todo teniendo en cuenta que muchos de ellos jamás salen de la ciudad? Los que los compran, lo hacen sola y exclusivamente por una cuestión de prestigio, dudoso prestigio por otra parte.
Por supuesto que a los propietarios de este tipo de vehículos les importa un carajo el medio ambiente, el cambio climático, el consumo de sus pequeños monstruos o el impacto que causan en las ciudades, pero al resto de los mortales sí que nos importan estas cuestiones. O deberían importarnos si tenemos dos dedos de frente.
No aplaudo estos métodos de los activistas, pero entiendo el mensaje que quieren transmitir:
La repetida e indecente 'moda' de los activistas de pinchar los neumáticos de los SUV: «Son peores que toda los aviones»https://www.msn.com/es-es/motor/noticia ... 0a90&ei=22