Esas historias que nos aterraban cuando éramos niños, historias contadas por abuelos que creían en brujas, hadas y duendes, esas historias que, contadas después de media noche, hacían que tuviésemos pesadillas y gritásemos ayuda en mitad de la noche.
Esas historias que nos estremecían contadas en la adolescencia, en un grupo de amigos que reían con nuestra cara seria, a pesar de la seriedad que poníamos a nuestras palabras.
Esas pesadillas nocturnas que aún nos acongojan.
Esa mano que desliza nuestra manta y nos hace recogerla, pensando que sólo es el tacto de seda que la manta posee.
Esa voz que, en sueños, nos saca del mismo para no saber si era sueño ó realidad.
Esta es la sección de nuestros más profundos miedos contados en voz alta.
¿Te atreves........?.