Un conspiranóico muere y va al Cielo. Le recibe Dios y le dice que puede preguntarle lo que quiera, y tendrá la respuesta correcta. Sin dudarlo, el conspiranóico pregunta:
- ¿Quién mató realmente a Kennedy?
Y Dios le responde:
- Fue Lee Harvey Oswald. Actuó sólo y le disparó tres tiros con un fusil Mannlicher-Carcano equipado con mira telescópica.
Y el conspiranóico murmura:
- La conspiración llega hasta mucho más arriba de lo que me imaginaba...