Monike escribió:A mí los toros no me dicen nada. Es más, cosa más tonta no he visto, salir a la plaza para demostrar valentía ante un animal bravo.
El caso es que el hombre no se enfrenta al toro de tú a tú, para torearlo tiene que mermarle fuerzas con las picadas y las banderillas, y es ahí, cuando el hombre, cobarde por naturaleza, se enfrenta a la bestia, después de debilitarla. Pero si hay gente a la que le gusta "la fiesta", pues nada. Quién soy yo para decirle lo contrario.
Esa es la base, no ponerse a criticar algo que a nosotros no nos va ni nos viene, porque, mayormente, no lo vemos o lo vemos desde otra perspectiva de a quien realmente le gusta y, se supone, que entiende o le satisface a otros niveles.
Pues sí... lo que es absurdo es ir a los toros, sin que realmente te gusten, sólo porque a otros no le gustan y se ponen muy pesaditos con el tema...
Vamos, es que esto es ridículo fuerza seis en la escala de Richter... o algo...
;-))
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