Siento un poco de cansancio por aquí. Algunas de vuestras palabras pesan y no me permiten leeros todo lo alegremente que me gustaría, porque te arrastran levemente hacia la tristeza. Noto vuestra alegría como si hubiera enterrada en ella un cierto agotamiento. Es como si vuestras emociones impregnaran las palabras que escribís del cansancio del día a día. Esa risa vuestra es una risa llena de responsabilidades, por eso le falta algo de vida.
La inquietud propia de los que hacen un esfuerzo por evadirse mediante Internet me provoca desconfianza. Y cuantas más bromas hacéis más me doy cuenta de que algo no funciona como debería. ¿Es posible que este sea un foro de gente encorvada por la responsabilidad y que necesite aligerar su carga a través de mundos oníricos proyectados en una pantalla?
¿Qué os pasa, gente?