Uno de los genes más espectaculares es, sin duda alguna, el gen MC1R, un receptor de melanocortina y uno de los más importantes implicados en el fenotipo que conocemos popularmente como “pelirrojo”.
Este gen codifica para un receptor proteico que se expresa en la superficie de los melanocitos; regula, entre otras cosas, la pigmentación de la piel. Debido a esto, si los alelos de este gen tienen una función nula o reducida, se produce un fenotipo pelirrojo.