¿Y cuál es la fórmula del éxito?, yo lo que veo es que los países del Este se apoyan y votan entre ellos (quizá por afinidad en gustos, no quiero pensar otra cosa), y que hay muchos intereses políticos en las canciones ganadoras.
La del año pasado, por ejemplo, de Israel y reivindicativa total; a mí me pareció un bodrio de canción y de puesta en escena, pero no fue eso lo que se valoró. Y si hablamos de Cristina Wurst, en 2014, tampoco la canción valía gran cosa, pero nuevamente era reivindicativa.
Además, es un festival que exige una gran inversión en escenario y teatralidad, y no sé yo si compensa económicamente.
Pd. La Venda es espantosa, pero vete tú a saber por dónde salen los tiros, igual las eligen así deliberadamente para no ganar