«Todos somos parte de esta historia». Con esta frase ha lanzado la plataforma de contenidos HBO su nueva serie, Patria. Pero es el cartel promocional de la adaptación de la novela del escritor Fernando Aramburu, ambientada en una localidad rural del País Vasco durante la época más dura de ETA, el que ha originado grandes críticas y opiniones enfrentadas en las redes sociales. La promoción de la producción, cuya emisión arrancará el próximo 27 de septiembre, ha sido duramente reprochada por la equidistancia y la comparación que parece realizar entre una víctima asesinada por ETA y un miembro de la banda terrorista sufriendo una tortura.
El póster está compuesto de dos imágenes. A la derecha aparece, bajo una lluvia torrencial, una mujer sujetando el cadáver de su marido, que acaba de ser objetivo de un atentado de la banda terrorista. A la izquierda aparece un joven desnudo tirado en el suelo de una oscura habitación en la que al fondo aparecen otras tres personas, es decir, un condenado o sospechoso de ETA aparentemente torturado en dependencias policiales.
El propio autor de la novela, Fernando Aramburu, ha criticado duramente el cartel, calificando su diseño de un «desacierto». En opinión del escritor, se trata de «una estrategia de márketing que no comparto. Incumple una norma que yo me impuse cuando escribí mi libro: no perder de vista el dolor de las víctimas del terrorismo, tratarlas con la empatía y el cariño que merecen». No obstante, para el autor de la historia, la serie sí cumple con esa norma y, en este sentido, también ha mostrado su malestar con los «opinantes precipitados».
El escritor, que ha visto los ocho capítulos de la serie. asegura que «hay una o dos secuencias que me chirrían; pero la trama es en líneas generales próxima a lo que yo narré en mi novela, con una clara línea divisoria entre quien sufre y quien hace sufrir; al mismo tiempo con un nítido propósito de mostrar la circunstancia humana de cada uno de los personajes»
