FORO EXPLÁYATE

Nadie la puede ver, nadie la puede oler, nadie tiene un sentido para detectarla, casi nadie habla de ella, pero sigue estando ahí, muy presente, y seguirá estándolo por los siglos de los siglos... Hablamos de la radiactividad en toda la zona afectada de Chernóbil, que abarca miles de kilómetros cuadrados, claro.

Aunque el Super-GAU de Chernóbil sucedió el 26 de abril de 1986, es decir, hace casi 40 años, sus consecuencias, al margen de una cifra incalculable de muertes por cáncer en toda Europa y de todo tipo de enfermedades, están muy presentes, y la ciencia va descubriéndolas poco a poco: por ejemplo, las mutaciones causadas por la radiación, aunque apenas vemos todavía la punta del iceberg de las mismas, puesto que se trata de procesos que duran siglos o incluso milenios. No obstante, la ciencia puede hacer ya interesantes observaciones.

Los mutantes de Chernóbil y sus lecciones

https://www.nationalgeographic.es/video ... FNDTe-2ju8


La ciudad fantasma de Pripjat: Los bloques de viviendas siguen ahí, las personas tuvieron que huir. Ahora es una ciudad fantasma.

Quince minutos que merecen la pena:

Hermoso ver cómo la naturaleza ha recuperado sus terrenos perdidos, en su día, en favor de los humanos. Se dice que los lobos de Chernóbil han desarrollado una resistencia natural a la radicación. No sé si esto habrá sucedido, también, con otros animales.

Astur escribió:Hermoso ver cómo la naturaleza ha recuperado sus terrenos perdidos, en su día, en favor de los humanos. Se dice que los lobos de Chernóbil han desarrollado una resistencia natural a la radicación. No sé si esto habrá sucedido, también, con otros animales.

Los humanos somos una plaga para la naturaleza y sus criaturas, esto se vio por ejemplo durante el confinamiento por la pandemia, una época en la que los cielos habitualmente grises por la contaminación en muchas ciudades se volvieron de un azul resplandeciente, y muchos animales pudieron por fin moverse libremente en sus hábitats, liberados provisionalmente de la presión humana.

En el tema de Chernóbil el problema es que el monstruo invisible de la radiación acecha tras la fachada de naturaleza pujante, y lo hace en forma de mutaciones de todo tipo en la fauna y la flora, incluidas las deformaciones más inesperadas, como las que se muestran en el video del artículo que abre el hilo.

Además, lo que está por venir a largo plazo solo se irá viendo poco a poco. Sabemos por amarga experiencia que el aumento de mutaciones supone inevitablemente un aumento exponencial en los casos de cáncer... a más mutaciones, más riesgos de 'errores' en los procesos de renovación celular, y a más errores celulares, más riesgos de formación de tumores malignos. Es una ley inexorable.

Algunas imágenes tomadas por Igor Kostin:

https://www.bbc.com/mundo/noticias-inte ... l-56889123

Y una galería de fotos:

https://www.elle.com/es/living/ocio-cul ... nte-fotos/

Y por miles de años... la radiactividad no es eterna, el problema de una hecatombe nuclear no lo padecerá el planeta en sí, si no la especie humana, que se autoextingiria ella misma o quedaría una mínima parte de ella que crearia una nueva civilización de paz, por suerte y para desgracia nuestra, el planeta en miles de años o millones se regenerara, mientras que nosotros, seremos polvo de estrellas.

Solvia escribió:Y por miles de años... la radiactividad no es eterna, el problema de una hecatombe nuclear no lo padecerá el planeta en sí, si no la especie humana, que se autoextingiria ella misma o quedaría una mínima parte de ella que crearia una nueva civilización de paz, por suerte y para desgracia nuestra, el planeta en miles de años o millones se regenerara, mientras que nosotros, seremos polvo de estrellas.

La radiactividad no es eterna, pero para nosotros, pobres mortales de vida tan cortita, como si lo fuera.

Pongamos el caso del plutonio, uno de los materiales radiactivos más mortíferos, presente tanto en Chernóbil como en Fukushima:

"El plutonio, concretamente el PU-239, tiene un periodo de semidesintegración de 24.100 años y "sólo al cabo de 20 periodos de semidesintegración (482.000 años) se puede decir que será inofensivo para el medio ambiente", según el grupo de ecologistas Científicos y Técnicos por un Futuro No Nuclear.

Es decir, a no ser que los millones de personas afectadas esperen vivir más de 482.000 años, el plutonio esparcido por el medio ambiente de la central de Chernóbil seguirá siendo un peligro mortal para ellas. Si logran vivir pues más de medio millón de años, entonces ya no tendrán que temerle. A no ser que en ese periodo de tiempo no se hayan producido nuevas catástrofes nucleares, claro, ya sea por accidente o por una guerra.

Hablemos de Fukushima:

El plutonio, una bomba para la salud y la naturaleza

https://www.levante-emv.com/internacion ... 74702.html