Aquella noche fue tan esperpéntica que nunca seras cabra montesa de macho iberico, cabrita, porque yo soy el gran cabron consentidor, panfilo, putero, alcoholico, abandonado por su mujer, feo, resentido y asfixiado por las deudas, que siempre ha tenido mala suerte, pero hoy todo va a cambiar a mejor. He decidido ser indiferente a lo absurdo porque no tiene caso desperdiciar mi tiempo. Voy a empezar una nueva vida contigo.
Controlar las neuronas de mi pene es prácticamente imposible porque carece de ellas, pero....ja,ja,ja ! no cambiaría el macho ? Si, lo cambiaría, pero nunca por un especimen a falto de varios hervores, irremisíblemente, seria tan simple cuanto una caricia ,en sus partes nobles para darse cuenta de que es un manso sin pizca de sensibilidad ni intención agorera...
Entonces cómo le largarás de tu lado...?
Llamando al manicomio, que le quiten internet o quizás mejor obligandole a escuchar a Pimpinela en "Olvidame y pega la vuelta". Pero mejor te ignoro, pasando de ti y de tus putas obsesiones de psicópata, no hay nada mejor que la indiferencia...