PARADISELOST33 escribió:...que hubo un hostión de los de privarte de varias piezas molares.
Y ahora que te has acostumbrado a los implantes no quieres que te vuelvan a desdentar, pero al mismo tiempo te encantaría tienes la esperanza de que esta vez no acabes en el dentista.
P.D. Tranquilo, hombre, tranquilo sin dientes siempre podrás comer purés.
P.D.2 Muy poetico lo del velo ese, de verdad. Y queda muy tierno y tal, pero la imagen que das es la de las muelas que yo te digo...
P.D.3 Y la de que, a estas alturas, es cuando estás terminando de sorberte los mocos.
No, no te equivoques. Hasta ahora no he tenido ningún desengaño amoroso porque nunca he estado enamorado. Para mí, el mismo día en que todo comenzaba era el mismo día en que sabía que tarde o temprano todo iba a terminar.
La idea del velo de Maia es muy importante, porque te permite saber qué es lo que puedes esperar y hasta qué punto te puedes comprometer. Tu obvías todo esto y te quedas con lo más superficial, que es una dependencia emocional satisfecha, a la que llamas amor correspondido. Para ti el velo de Maia no se ha descorrido. En la medida en que el autoengaño opere en ti, tus opiniones serán siempre favorables al amor, a las relaciones, etc.