Tengo que admitir que en principio no tenía una buena relación con mi padre, pero luego la vida me enseñó que antes de que se fuera de éste mundo tenía que compartir cosas buenas con él porque de todas formas así tengamos pensamientos distintos, al final él ha sido el hombre que me ha dado la vida.
Como a los 26 años de edad, luego de haber estado 8 años fuera de casa fue que empecé a hablar con él nuevamente y tuvimos una muy bonita relación hasta hace poco que falleció, pero siendo honesto tengo is buenos recuerdos con él que la verdad los atesoraré por toda mi vida, e intentaré ser un mejor padre con mi hijo.
Lo más difícil de todo fue el proceso de sucesión porque la verdad es que una muerte te hace sentir muy mal pero mientras no importa porque hay que hacer todo el papeleo necesario y demás para poder hacer todo a lo legal, y eso siendo honesto me molesta mucho