SuperMario escribió:Vale, toda la gente que cuenta de primera mano su situación, todos los vídeos y todos los informes independientes que hablan de la grave situación alimentaria de Brasil, en buena parte por la carestía de la vida, el desempleo y el subempleo, no tienen valor para ti.
Pues ahí lo dejamos, pero quede claro que la ceguera voluntaria nada tiene que ver con el patriotismo, sino más bien con el nacionalismo de hojalata.
Tienes mala compreension lectora y un fascinio inverso por Brasil.
Lo que pongas no esta arriba de los 19millones y los mapas del hambre.
Tengo una muy buena comprensión lectora, demasiada a veces, y no porque lo diga yo; además, sé leer entre líneas.
Cifras arriba, cifras abajo, hay una realidad muy simple, innegable y que hasta un niño comprendería:
En Brasil hay millones de desempleados que vegetan prácticamente sin ayudas, y muchísimos millones más que sobreviven con sueldos miserables y subempleos precarios con los que tienen que mantener muchas veces a familias numerosas compuestas de 5, 8, 10 cabezas.
En no pocos casos, son madres solteras o separadas que tienen que sacar adelante a su numerosa prole. ¿Alguien que no sea un fanático enfermizo puede negar esta realidad? Evidentemente, NO.
La carestía de la vida y con ella también de los alimentos no ha parado de agudizarse en Brasil en los últimos años. ¿Se puede discutir esto? Pues no, porque cualquier brasileño que no sea millonario lo nota cada día.
Pues bien, si juntamos los factores desempleo + subempleo con sueldos miserables en un enorme porcentaje de la población + elevado índice de familias numerosas + incremento de la carestía de la vida y los alimentos......
¿A qué conclusión llega cualquier persona que sepa sumar dos y dos?...
Pues evidentemente, que muchísimos brasileños tienen que luchar a brazo partido cada día para alimentar precariamente (es decir, subalimentar) a sus familias y a sí mismos, cosa que gran número de ellos no logra ni haciendo colas de horas y horas para obtener un poco de comida producto de donativos solidarios. Entrar a un supermercado a hacer la compra de lo más básico es para ellos un sueño imposible.
Pues sí, estamos hablando de HAMBRE. Blanco y en botella. Los vídeos que he puesto apenas son un pálido reflejo de esa realidad cotidiana para tantos millones de personas, pero ayudan a hacerse una idea.