por Julio Jimenez » 11 Jun 2013, 21:49
A ocho años de la fracasada operación que se trazaron varios dirigentes de la ultra derecha venezolana opositora para asesinar al Presidente de la República, Hugo Chávez Frías, nuevamente salen a colación elementos de la llamada “invasión paramilitar colombiana” en la finca Daktari.
Como se recordará, se trató de un triste y peligroso episodio en el que asesinos, escuadrones de la muerte provenientes del vecino país, en ese entonces gobernado por el jefe de los paramilitares, Álvaro Uribe Vélez, hicieron presencia en plena capital venezolana para llevar a cabo su cometido a sueldo. La finca Daktari, propiedad de Robert Alonso, apodado “El Coronel” y hermano de la acérrima opositora y actriz María Conchita Alonso, sirvió como centro de entrenamiento y alojamiento para los más de 150 integrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia.
Alonso, ideólogo de las “guarimbas”, “foquismos” y del “tranca tu calle” con el que los opositores quisieron forzar la caída del Gobierno en los años 2002, 2003 y 2004, es un ferviente opositor, integrante del ala radical de la denominada Coordinadora Democrática queho se hace llamar Mesa de la Unidad Democrática o Mesa de la Ultra Derecha (MUD). Quedó comprobado que Alonso prestó todo tipo de apoyo y logística para el entrenamiento de los paracos, que vinieron con la misión expresa del magnicidio.
No obstante, este siniestro plan fue abortado gracias a la actuación oportuna de los órganos de inteligencia del Estado venezolano, que allanaron la citada propiedad ubicada en el municipio El Hatillo del estado Miranda. Todo este desmontaje fue llevado a cabo por los cuerpos de seguridad venezolanos sin disparar un tiro o sin que hubiese habido algún muerto o herido.
En aquélla ocasión, cerca del mediodía del domingo 09 de mayo de 2004, en cadena nacional de radio y televisión, el Presidente Hugo Chávez interrumpía la edición 191 de su programa Aló Presidente, que se transmitía desde su natal estado Barinas, para ofrecer una información de importancia vital para el país: "Antes que el sol saliera, nuestros hombres y mujeres (integrantes de los cuerpos de seguridad del Estado) habían capturado a 56 paramilitares, todos colombianos, con uniformes venezolanos, corte militar, brazaletes blancos y la bandera venezolana. Todas estas detenciones se produjeron en una finca propiedad de un sujeto de nacionalidad cubana, de nombre Roberto Alonso, apodado "el coronel", quien fue uno de los ideólogos de la llamada operación guarimba, vinculado estrechamente con la Coordinadora Democrática. Se calcula que sean 180 paramilitares. He ordenado capturar hasta el último de estos terroristas. Para suerte de ellos no han opuesto resistencia armada porque la orden que lleva la DISIP, el Ejército, la GN, es que si hay resistencia armada, hay que utilizar las armas de la República con toda la contundencia que fuera necesaria", aseveró tajantemente el Jefe del Estado.
La cadena de radio y tv, convocada por el Presidente Chávez, se produjo por la testarudez de los canales privados de televisión nacional que desde el principio negaron el hecho y con ello el derecho a la información que tienen los venezolanos. Simplemente, las televisoras abrieron sus espacios a dirigentes del oposicionismo que calificaban la captura de los paracos en la finca Daktari como un "show montado por el gobierno", según palabras del propio Felipe Mujica, Secretario General del Movimiento al Socialismo (MAS), el mismo político que le mentó la madre a Chávez en vivo y directo por Globovisión.
A pesar del cerco televisivo privado y la insistencia en calificar de montaje y de show la acción que capturó a los paramilitares colombianos, la información trascendió de inmediato las fronteras venezolanas y vino el reconocimiento internacional a las acciones emprendidas por el Gobierno Bolivariano. Posteriormente, el entonces Secretario General de la Organización de Estados Americanos, César Gaviria, quien había sido presidente de Colombia, emitíó un comunicado reiterando "enfáticamente su posición de total respaldo al orden constitucional" en Venezuela y dejaba claramente sentado que "los problemas de Venezuela deben resolverse exclusivamente por los venezolanos" y no por facciones externas que iban a actuar dentro de la violencia.
Hasta la fecha, más de 130 paramilitares han sido capturados por los organismos de seguridad venezolanos y puestos bajo la custodia de la justicia militar, que imputó (hasta la fecha) a unos 70 del delito de conspiración. Otro grupo de militares activos también ha sido detenido, en casa de uno de los cuales se hallaron 600 chalecos antibalas; así como a varios integrantes de la facción de Militares del Hotel Four Seasons, que tenía su bastión en la Plaza Altamira de Caracas, a quienes se vincula con la aparición de un cadáver, presuntamente paramilitar ajusticiado, encontrado en la hacienda Daktari.
Todo este caso sigue su curso en la justicia y viene a colación por los nuevos elementos que se presentan en el libro “La invasión paramilitar, Operación Daktari”, que recientemente bautizaron los reconocidos autores Luis Britto García, Miguel Ángel Pérez Pirela y Miguel Rodríguez Torres, éste último ex director de la Disip. Según Pérez Pirela, en la operación Daktari estaban comprometidos periodistas, dueños de medios privados, empresarios y dirigentes oposicionistas, miembros de la tristemente célebre Coordinadora Democrática, amén de que Álvaro Uribe Vélez, para la fecha Presidente de Colombia, con hipocresía y todo, tenía sus manos metidas en este asunto.
Según el conductor del programa “Cayendo y Corriendo” de Venezolana de Televisión, los planes conspirativos continúan y se hacen más arduos cuando las encuestas, las redes sociales y la calle revelan que Henrique Capriles Radonski,el candidato de la MUD, no sólo está derrotado sino que, como también reseñan las agencias internacionales, "esa candidatura no levanta vuelo". Pérez Pirela también dijo que en Miami, en la casa de una conocida periodista venezolana, se reúnen el ex magistrado del Tribunal Supremo de Justicia y prófugo, Eladio Aponte Aponte, y Eligio Cedeño, otro prófugo y banquero venezolano procesado por el caso de las divisas con la empresa Microstar.
Finalmente, el reconocido periodista y filósofo Pérez Pirela recordó que en las declaraciones que dio el ex comandante de las Autodefensas Unidas de Colombia, Salvatore Mancuso, planteó que en el año 2008 la oposición venezolana le pidió a éste crear un paraestado en Venezuela, "es decir un Estado fuera del Estado, que pudiera actuar al margen de la ley". Al respecto, consideró que si el pueblo venezolano deja que la oposición siga en este juego, "nos vamos a encontrar en una guerra civil continuada silenciosa, como la que Álvaro Uribe creó en Colombia".