AVEFENIX escribió:Quizas me equivoque, pero yo creo que los antiguos vkingos llegaron a Peru.
quizas los vikingo eran los huarpas,
de otra manera como explicar la historia del dios wiracocha el dios de los inkas que era representado por alguien rubio y barbudo,
quizas llegaron a Mexico tambien, su dios era igual rubio y barbudo.
justamente cuando llegaron pizarro y cortez respecticamente, pensanron que sus dioses regresaron,
ademas han encontrado restos de inkas en noruegas de la epoca 1200 o 1300 mas o menos, estan exhibiendose en el museo de oslo.
esa es mi idea,
pero claro quizas me equivoque
Las crónicas mesoamericanas hablan de hombres hechos Dioses, que enseñaron a los indígenas el arte de trabajar los metales, la agricultura, las ciencias y la medicina, la conciencia religiosa, escultura y arquitectura, la ingeniería, las matemáticas y la geometría, astronomía, orfebrería, el gobierno ... Éstos tanto en la cultura azteca como maya, parecen ser la misma deidad, el mismo hombre. Unos lo llamaron
Quetzalcoatl y otros
Kukulkan, y esas mismas crónicas cuentan que tanto él como el resto de su raza, vino del país de
Azthlan (la Atlántida).
Las crónicas mesoamericanas describen a los hombres de esta raza de forma similar a como son los occidentales, de alta estatura, tez y piel blanca o rosada, pelo claro, ojos claros, barba prominente, cabeza alargada y aplastada (índice mesocefálico o dolicocéfalo,
que es la media de los españoles); completamente distintos en todo a los indios. Las deidades atlánticas de estos pueblos mesoamericanos son similares a los dioses iberos como Mari o Sugar pudiendo como aquéllos adoptar forma de serpiente. En el caso mesoamericano sólo hay dioses masculinos, pues parece que son el símbolo de aquellos hombres cazadores y pescadores, herederos de la cultura Clovis, que llegaron a ser inmortalizados como héroes divinos.
Todo lo anteriormente descrito, forma parte de la mitología los pueblos precolombinos.
Las crónicas de los conquistadores españoles, hablaban de una casta o minoría aristocrática mesoamericana, de aspecto europeo e incluso de cabello y ojos claros (rasgos totalmente desconocidos en los pueblos precolombinos). Otro Dios americano fue
Tonatiuhtéotl o Tonatiuh, el cual fue identificado con el adelantado
Pedro de Alvarado, por sus ojos celestes y pelo rubio.
Don Pedro de Alvarado deificado como el Dios del Sol Tonatiuh. Los mexicas consideraban a la raza española como los hijos del sol, dioses rubios y barbados fundadores de su civilización, de los que se esperaba su retorno.
Toda la religiosidad mesoamericana, se centra repetitiva y constantemente en el esperado
retorno de los dioses atlantes, es decir en deidades masculinas, huidas y lejanas que habían dejado un vacío enorme.
Lo que realmente sorprendió a los españoles al llegar Méjico, fue que parecía que los indígenas les estuvieran esperando y era porque los indígenas creían en una profecía que garantizaba el retorno de la
raza sobrenatural de dioses-hombres que fundaron una parte importante de la civilización americana durante su desarrollo. Por esta razón, los indígenas identificaron a los conquistadores españoles con la que llamaban
"raza del sol", a su vuelta del país del Este (origen de los hijos del sol y la sede del concilio de los dioses), de donde decían que procedía dicho prodigioso pueblo. Muchos españoles como
Pedro de Alvarado, fueron identificados y se les conoció con el nombre de estos dioses americanos por parte de los pueblos precolombinos.
"Llegaron hombres barbados con el cabello color del sol" (crónicas mesoamericas)
Continuando con las
crónicas de los conquistadores españoles, dicen:
"En Méjico existe una conocida leyenda que cuenta la historia de Quetzalcóatl, y que al parecer fue decisiva para el transcurrir de la historia en tiempos de Moctezuma y de Hernán Cortés. De Quetzalcóatl se dice que llegó desde muy lejos (algunos decían que desde Europa o del Oriente), que tenía la tez clara a diferencia de los aztecas, que era muy alto, tenía barba y portaba una túnica blanca. Además, se dice que este personaje se mantuvo entre ellos enseñándoles ciertas habilidades y ciencias, así como reglas y valores morales para sus vidas. El dios hermano mellizo de Quetzaocoátl, fue Xólotl, sincretismo del dios atlante ibero-egipcio Anubis. Xólotl o Anubis, fue representado tanto en Egipto como en Mesoamérica con cabeza de can. Este dios, fue señor y protector de la estrella de la tarde (es decir Venus o Hespero, nombre con el que se conocía a la Península Ibérica, también llamada Hesperia o Hespéride). Sincretimo también de Anubis-Xólotl, es el dios atlante Tubal, patriarca de los iberos y de la Atlántida, por tanto también de la estrella de Venus".
Lo curioso de todo es que los incas pensaron lo mismo que los aztecas cuando vieron por primera vez a
Francisco Pizarro. Hombre barbado con el cabello color del sol y ojos claros.
Que más puedo decir, los aztecas e incas vieron la llegada de los españoles como el retorno de los atlantes. hijos de los dioses, que desaparecieron dejando una civilización a medio terminar, parada en el tiempo y huérfana, probablemente la causa la desaparición de los antiguos ibero-atlantes fue la fue la baja densidad de población, el mestizaje y por la depresión edogámica.
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