Astur escribió:Yo he hablado de una dictadura, pero cuyo líder sea un tipo del perfil de Bukele. A mí, las anteriores dictaduras haitianas me la sudan. Te estoy describiendo a qué tipo de autocracia me refiero. No a la que tú quieras suponer. Sólo una autocracia de las características que describo, podría pacificar Haití. Haití no se soluciona con una partitocracia corrupta a la española, que sería lo que tú propondrías.
En cuanto al perfil del progresista medio, no hay ninguna duda. Parásitos del estado, corruptos, buenistas, posmodernos, emasculados y cobardes. No hay otra posibilidad, del que se autodenomina progresista. Sois decadencia y garantía de fracaso. Sólo hay que ver lo que la socialdemocracia ha logrado en los países en los que ha gobernado. De ahí que cada vez sean menos los países europeos que apuestan por esta fórmula para gobernar sus países. Pero, al menos, en estos países, la izquierda gobierna aliada con liberales. Los únicos borregos que seguimos tropezando con la misma piedra, entre socialdemócratas y comunistas, somos nosotros.
Estás obsesionado con Bukele, olvidando que la situación de El Salvador es única e intransferible y que, además, Bukele no es un dictador propiamente dicho, ya que se ha sometido a unas elecciones y las ha ganado, si bien ha hecho algunas trampillas con la Constitución. Pero no le considero un dictador. Y yo no supongo nada, simplemente leo, y tú has escrito un poco más atrás que para Haití lo mejor sería una "FÉRREA DICTADURA". O sea, traducido al román paladino, más represión, corrupción, saqueos, torturas y muertes. Como si los haitianos no hubieran tenido ya suficiente de esa receta.
¿Las anteriores dictaduras de Papa y Baby Doc te la sudan? ¡Nos ha jodido, tú no has tenido que padecerlas! Pero seguro que a la masa de haitianos que ha sufrido la violencia de los Duvalier en sus propias carnes no se la sudan. Al margen de los incontables muertos causados por los tiranos, hay en el país miles de torturados que sufrieron atroces suplicios, desde mujeres con los ovarios quemados por descargas eléctricas hasta gente con las uñas arrancadas con tenazas, pasando por cicatrices en el cuerpo producidas con hierros candentes o cigarrillos apagados en los ojos de las víctimas, con la ceguera consiguiente, entre otras lindezas. Claro, para ti todas esas cosas son bagatelas, lógico que te la sude.
Una de tus muchas ideas equivocadas es creer que solo una autocracia, o sea, una dictadura más o menos implacable o por lo menos un gobierno con un aprendiz de tirano, es la forma correcta de llevar un país, que las democracias son débiles por naturaleza y que los políticos de talante democrático son unos... transcribo tus propias palabras: "Parásitos del estado, corruptos, buenistas, posmodernos, emasculados y cobardes..."
Nada más lejos de la realidad. Pongamos por caso a Winston Churchill, dirigente de un país democrático en horas dramáticas... ¿era un pelele, un buenista o un emasculado? ¿Eran unos peleles buenistas y blandengues Konrad Adenauer, Charles de Gaulle, Willy Brandt, Olof Palme, Sandro Pertini o Adolfo Suárez, todos ellos dirigentes en unas democracias o socialdemocracias que tanto desprecias? ¿Acaso eran preferibles sus anteriores gobernantes Adolf Hitler, Philippe Pétain, Benito Mussolini o Francisco Franco?
En realidad, son las dictaduras las que muestran una gran debilidad, más allá de las apariencias, puesto que están subordinadas a los caprichos de un dictador vitalicio que puede llevar al país a la ruina sin que nadie pueda evitarlo, excepto mediante el asesinato. En esas democracias que tú consideras propias de gente pusilánime, el presidente que lo haga mal o del que el pueblo esté ya cansado, puede ser removido mediante las urnas, cosa que no pasa en tus queridas dictaduras: hay que tragarse al dictador hasta que se produzca el hecho biológico.
Volviendo a Churchill, nada más terminar la guerra perdió las elecciones en su país, pese a haber figurado entre los triunfadores en el conflicto mundial, con lo que tuvo que dejar paso a Clement Attlee. Pero los británicos querían un rostro nuevo en Downing Street después de tantas penalidades.... y Churchill se fue. ¿Eso es debilidad? ¡Para nada, eso es fortaleza!
Haití no necesita nuevos dictadores, sino una democracia funcional con unas leyes que se apliquen y una corrupción que sea cortada de cuajo. Esa situación llevaría además a muchos países ahora reticentes debido al caos y la corrupción omnipresentes, a brindarle su apoyo al muy necesitado país caribeño.
A ti te la suda, pero en la memoria de los haitianos, la historia reciente del país sigue muy presente:
Hambre, terror y vudú: el Haití de Papa Dochttps://www.lavanguardia.com/historiayv ... breza.htmlBebé Doc y Papa Doc